1.05.2014

El púlpito laico (05/01/2013)


De 43 años y catalán, Rafael Santandreu ofrece psicología cognitiva en su vertiente más radical en El arte de no amargarse la vida, el libro español de autoayuda más vendido desde 2012 (200.000 ejemplares). “A unos les parece muy natural y lógico lo que digo. Otros se indignan y me insultan. Me voy acostumbrando”, dice
 
 

 
Mi hermano pequeño me preguntó que cuánto cobraba en mis consultas y la verdad es que cobro bastante. 'Pues solo lo podrá pagar la gente a la que le vaya muy bien', me dijo. Y se me ocurrió escribir para que quien lo desee haga psicoterapia por su cuenta y pagando poco.
 
 
 
Pregunta. 
Doctor, sufro terribilitis.
Respuesta. 
Alégrate, te puedes curar. Se trata de que controles a partir de ahora tu diálogo interno. Crees que necesitas muchas cosas para estar bien y no es verdad. Si ajustas tus necesidades al mínimo empezarás a disfrutar de la vida. Pero hay que hacerlo en serio, de forma radical, porque si no, no se cambia.
 
P. Dice en su libro que pensar en la propia muerte “pone en perspectiva cualquier provocación y nos proporciona serenidad profunda”. No me sale.
 
R. No lo piensas bien. Cada proceso natural es deseable. La muerte es buena y bonita. ¿Me muero mañana? ¡Fenomenal!
 
P. ¿Por qué tienen tanto éxito los libros de autoayuda?
R. Porque la gente tiene una urgente necesidad de saber cómo vivir. Los libros de autoayuda de ahora son los libros de filosofía y religión de antaño.
 
P. Dice que sobrevaloramos la comodidad. Pero hay momentos, viajando en tren, por ejemplo, en que un niño se pone a gritar...
R. Te tienes que dar cuenta de que tienes una incapacidad seria en ese momento. Puedes ser súper feliz aunque haya ruido. La comodidad jamás ha dado la felicidad. Hay que cambiar el chip. Si no, la necesidad de comodidad seguirá creciendo.
 
P. “Me gustaría que fueras más ordenado pero si no lo eres te seguiré queriendo”. Interesante su propuesta para solucionar los problemas de pareja.
R. La exigencia entre iguales nunca funciona. Tarde o temprano, si te impones, te la devuelven. Nadie confía en que sugerir con amor es suficiente para que te lo den todo. O al menos el 80%, cuando antes te daban el 20% y con unos berrinches terribles.
 
P. Creo que la mayoría calificaría sufrir un cáncer como “terrible”. Solo un monje budista lo describirá como “malo”.
R. Mucha gente corriente se lo toma con fortaleza y tranquilidad. Es importante que sepamos que es posible verlo así. Tú eliges si quieres ser débil o fuerte.